Cuantos compañeros dicen, que cuando haces una QH
ya no hay remedio, que tienes que repetir, también están
los que como yo, decíamos que qué se nos había perdido
ahí, y la verdad, ahora comprendo a los primeros, y con
esto no quiero ofender a los segundos ni mucho menos
pues cada uno tiene unas circunstancias, objetivos o formas
de ver las cosas. ¿ Porqué digo esto ? pues porqué
yo he pasado de ser de los que tiene que repetir, y es que
la QH lo tiene todo, que si bien organizada, que si bonita
que si esto, que si lo otro, no diré nada nuevo, ni lo voy
a decir ahora, la gente, la gente es especial, los voluntarios,
el publico acompañante, la gente de los lugares
por donde transita, y es que aun cuando recuerdo como
nos animaba la gente de la Hoz a nuestro paso, aún me
emociona como nos hacía sentir importante y sacar fuerzas
a la gente que como yo estaba pasando tres horas
después que los primeros y siguen hasta el que pasa el
último, impresionante, ahora se o me imagino cómo se
debe sentir un profesional al participar y terminar por
primera vez en un Tour, pues para mí fue lo mismo, lloré
y lloré y es que la QH te da todo lo que un apasionado
de la bici necesita, y eso ya lo sabemos los que como yo
nos vemos obligados a volver y solo sabemos dar como
respuesta, hay que vivirla.
Bendita la hora en que sin saber cómo me enfrasqué
en esta apasionante historia de la Quebrantahuesos.
Ah, gracias por hacernos seguir soñando.
Un saludo y nos vemos el 18 de Junio.
Jesús López